domingo, 4 de noviembre de 2012

Solo Mio- Capitulo 1


Capitulo 1

Perspectiva de ChangMin

Meses antes…

-¡Basta ya!

Hago todo lo posible para tratar de controlar ese líquido espeso y rojo que sale de tu estómago, pero la sangre no se detiene. “¡¿Por qué demonios no se detiene?!” – Miro al techo en varias direcciones con gotas cristalinas y saladas que no paran de salir de mis ojos, recorren mis mejillas, una a una resbalan y no puedo evitarlo- “¿Dios, que fue lo que hice” Grito eufórico tu nombre en medio de la gran habitación que una vez fue nuestro lugar, el testigo de tantas noches de entrega. Tu cuerpo esta tan frio, tu rostro tan pálido, tu boca tan seca. Y tengo miedo, tengo tanto miedo…

Grito tu nombre una vez más, con la esperanza de que  esta vez sí puedas oírlo, pero tus ojos no se abren. “¿Porqué no se abren? ¿Eh?” Te agito con algo de desesperación “tal vez duermes” quiero pensar eso, que solo duermes y que cuando despiertes podrás sonreírme como lo solías hacer.
Miro mis manos temblorosas, están manchadas al igual que mi ropa, al igual que mi corazón. Estoy sucio, tan sucio y no precisamente por ese liquido, si no sucio de alma, de corazón. Me doy tanto asco.

Quiero regresar el tiempo, no sabes cuánto daría por hacerlo. Pero no puedo, no puedo ¡No puedo maldición!
 -Me aferro a tu cuerpo, no quiero dejarte ir <No estoy listo para aprender a vivir sin ti> - ¡No me dejes!... Cómo le hago para explicarle al corazón y a la razón que ya no podré verte cada mañana, que ya no podré tu rostro tan cálidamente después de nuestras noches de pasión, de tu hermosa piel blanca que con los rayos del sol sólo resalta más tu indescifrable belleza.
 Te abrazo fuertemente… te abrazo tan fuertemente… y me memoria me traiciona y revoca el porqué llegué a esta tan estrepitosa acción~~


  -No, no quiero, no quiero entender- Esta es como la quinta vez que discutimos en el día a causa de aquello, de tu partida. Me cuesta tanto aceptar que te vas a ir y yo no podré hacerlo contigo, por ello me cuesta verte, ver como arreglas tu ropa en aquella maleta, el lo como tratas de que te entienda y pueda aceptar tu decisión…pero no JaeJoong ¡No! ¡No me pidas que acepte aquello, no!

-Pequeño, por favor… no comencemos otra vez con esto, por favor, ya te lo he explicado tantas veces, no hagas todo esto más difícil de lo que ya es…-

Si, lo sé, sé que hemos hablado tanto de aquello pero es que mi amor es tan grande por ti que no puedo asimilar todo esto. Así que me dirijo a nuestro cuarto y me siento al borde de la cama, colocando mis manos en mis orejas y cerrando los ojos fuertemente, para poder evitar escuchar tus palabras… tus palabras que solo me causan un dolor profundo en todo mi corazón. Pero aún así, puedo escuchar que entras en la habitación y te acercas lentamente hacia mí, y aunque no te observe en estos momentos, puedo saber que llevas una mirada tan triste de verme en esta forma, siempre es así, pero, no lo puedo evitar, no puedo…
Te pones frente a mí y con ambas manos bajas las mías, las diriges hacia tus labios donde comienzas a repartir besos cálidos, besos tiernos, los cuales hacen que no pueda evitar abrir mis ojos y poder contemplarte y  sin poder evitarlo lágrimas descienden de mis ojos y tú dejas lo que hacías y ahora repartes besos en mis mejillas, por donde recorren esas lágrimas que expresan el dolor que siento en estos momentos. Nos observamos en silencio y tu boca se dirige a la mía, me das un leve beso, el cual va tomando intensidad a cada paso y yo… tú sabes que yo no puedo evitar corresponderte, porque  eres mi perdición.

-ChangMin… ChangMin… por favor  ya no llores más, te amo, te amo tanto… hagamos este momento especial… mi pequeño…- Después de decir aquello, colocas tus manos detrás de mi nuca y profundizas el beso mientras te sientas a horcadas en mis piernas, nuestras besos se vuelven cada vez más húmedos y nuestras lenguas invaden la boca del otro ¡Dios! Es que eres tan exquisito…
Tus manos van bajando hasta dirigirse a mi camiseta la cual la sacas de un tirón y comienzas a aferrarte con fuerza en mi espalda, mientras yo hago lo mismo. Tu boca va repartiendo besos por toda mi cara hasta dirigirse a mi oreja, la cual muerdes y me susurras tan sensualmente – termina de desnudarte – y yo jamás te niego nada. Me levanto unos momentos mientras tú solo me miras de aquella forma tan penetrante. Acabando de retirarme todo, miras mi cuerpo de arriba hacia abajo y relames tus labios, de una manera tan sensual que hace que mi miembro empiece a latir y a ponerse tan duro como una roca. Te acercas hacia mí y me sientas otra vez al borde de la cama, nuestras miradas no pierden contacto ni un segundo y comienzas a agacharte lentamente hasta estar en frente de mi ingle, sigues observándome de esa manera tan lujuriosa mientras coges mi pene con fuerza con tu mano
¡Oh dios! Sé lo que vendrá ahora, tu mirada me lo dice todo y es inevitable no cerrar los ojos ante aquel acto – sólo tú eres el único que puede provocar estas reacciones en mí.  Con tu lengua lames la punta y toda la extensión de mi hombría. Trato de no emitir ruido alguno pero es casi imposible, terminas engullendo todo mi miembro lo que me hace gemir un poco, succionas con suavidad y tu lengua se mueve escurridiza.

-Ahh aaa – es inevitable permanecer callado- En un esfuerzo sobre humano abro mis ojos y miro que tu hombría esta tan igual a la mía, debieron ser mis gemidos lo que te pusieron en esas condiciones.
-Termina de una vez- pronuncio con dificultad -estoy ansioso, quiero sentirte-
Tus succiones empiezan a volverme loco, tu lengua igual, por lo que después de un rato termino en tu boca, Tragas mi semilla y me das a probar de ella con tus besos. En lo que haces esto, yo comienzo a desvestirte. Dejándote desnudo.

-Eres tan hermoso JaeJoong- digo, tú te sonrojas un poco. No tienes porque, es cierto, tu belleza es incomparable, jamás conoceré a un ser tan bello y perfecto como tú

-Eres mío Jae, mío- Te beso con desesperación.
Tomas mi mano y me recuesta en la cama. Tu cuerpo va cayendo encima del mío, hasta que los dos estamos completamente acostados. Recorres mi pecho desnudo, vas dejando marcas en el, marcas que tendré que guardar por mucho tiempo.
Desciendes cada vez más, encontrándote con mis tetillas con las cuales juegas un rato. Mis manos no se están quietas y acaricio tu espalda, tu cabello, todo lo que puedo. Desciendes, desciendes y desciendes cada vez más hasta llegar a lo que tanto esperas…

-¿Me permites?- preguntas con burla en tu voz. Solo asentí con la cabeza. Entonces mis piernas son tomadas y colocadas sobre tus hombros, te acercas y te posicionas en mi entrada

– ¿Con que voy a lubricarte? –

Preguntas con algo de desesperación en tu voz   - Descuida, no pierdas más el tiempo… - Sonríes satisfecho.
Lentamente vas entrando en mí, mis puños toman la sábana y la estrujan para poder aguantar el dolor. Te quedas quieto unos momentos, solo para acostumbrarme a ti, después de unos segundos comienzo a relajarme, el dolor es reemplazado por el placer, así que te indico que puedes moverte. Tus caderas empiezan a moverse deliciosamente con lentitud, pero estoy tan excitado que necesito sentirte más, así que comienzo a impulsarme un poco hasta que captas lo que te pido con insistencia. Tus movimientos ahora son más rápidos, dando en un punto que me llena de éxtasis.

-Aah ahh – jadeo sin control-
-Dime pequeño ¿Te gusta?-

Preguntas descaradamente, entonces te miro, no es necesario responder si lo sabes

-Más… ahh más fuerte ahh- sonríes ampliamente y muerdes tus labios al momento en que sales un poco y entras con brusquedad. Tus embestidas comienzan a ser más duras, esto conforme a mi petición, me llenas, me llenas por completo

-Ven ahh ven aquí-

Te suplico y te acercas haciendo que tu miembro se entierre más en mí. Tomo tu rostro y te beso, comiéndome tu boca, devorando tus carnosos labios. No paras de moverte, mi miembro esta atrapado entre nuestros cuerpos, por lo que cada movimiento lo estimula, haciendo que cobre vida y me lleve a perder más el control. Tu mano baja hasta mi hombría y la toma, masajeando nuevamente, esta vez con rudeza. Estamos llegando al clímax, así que después de más besos, caricias y embestidas, los dos al fin acabamos, tú dentro mio y yo en tu abdomen.

Estoy tan exhausto, pero ahora viene lo más difícil… la despedida.
Besas mi frente y te pones de pie, comienzas a vestirte y me pides que haga lo mismo

-Una hora para llegar al aeropuerto, así que sólo a pasado una hora- Digo tomando mi pantalón y colocándomelo
-ChangMin… te miro y me miras- estuviste estupendo
-No digo nada. Solo termino con la tarea de ponerme todo-


Llegamos al aeropuerto. En todo el recorrido de camino allí, no dijimos nada. Solo sostenías fuertemente mi mano mientras que yo veía por la ventanilla. No me atrevía a llorar, por más que quisiera en aquellos momentos no me lo permitía. Realmente te extrañaría mucho

“Pasajeros con destino a América, por favor abordar el avión”

Se escucha retumbar por todo el aeropuerto. Es tu vuelo. Tienes que partir

-Minnie- me llamas, pero yo desvío la mirada, finjo no oírte
-Minnie… tengo que tomar el vuelo-

Hago caso omiso de tus palabras, por lo que me tomas del mentón y tiras de el haciendo que te encare

-Tratemos de que esto sea lo menos doloroso posible ¿eh?- Me miras con ternura
- No entiendo- Mi voz se quiebra - ¿Cómo haces para que esto no duela tanto? ¿Ah?-
- Por favor- me suplicas, y tus ojos se llenan de lágrimas
- No me hagas esto, lo haces muy difícil para mí… no quiero tener que arrepentirme en el último momento y bajar del avión antes que despegue-
-Eso sería lo mejor que me podría suceder-
-Min…-
- ¿Y si me olvidas? – Me apresuro a decir - ¿Si encuentras a alguien más? – Mis ojos se vuelven llorosos, como los tuyos. Esta despedida es tan triste-
-Eso jamás pasará tontito…yo te esperaré…esperaré el momento en que nos veamos otra vez, y entonces te abrazaré fuertemente y nunca, nunca más nos separaremos…
-  ¿De verdad? – Sollocé
- Te lo prometo- Tomas con delicadeza mi rostro entre tus manos y susurras muy cerca de mis labios
-Tú y yo estamos destinados a estar juntos, te amo –

Dicho esto me besas con desenfreno, como si solo existiéramos tú y yo, dejando el alma en ello.

-Te llevas mi corazón- digo al ver como el avión despega contigo dentro. No puedo evitar que las lágrimas caigan, trato de mantener una sonrisa en el rostro, pero esta se esfuma por completo cuando el avión al fin desaparece en el cielo.  Por un instante creí que bajarías y correrías hasta donde yo me encuentro, me abrazarías con fuerza y me besarías, entonces dirías que no pudiste partir, que lo más importante soy yo…
Pero jamás sucedió eso. ¿Tal vez no soy tan importante?

Sin más me marcho a casa… esa que está tan llena de recuerdos, de tu risa, de tu voz.

-Mañana llegará el estudiante de intercambio, tendré que ir a recogerlo-

Me recuerdo a mi mismo al tiempo en que dejo las llaves sobre la mesa de centro y me dirijo a la ducha. Solo quiero dormir, dormir y no despertar.

-No sé como haré para vivir un año sin ti, JaeJoong-


1 comentario:

  1. Dioooss esto se esta poniendo taan triste.

    No se porque presiento algo.

    Gracias por el capo!!!

    ResponderEliminar